Un año que se termina, una lista interminable de logros, de esfuerzos, experiencias, aprendizajes, intentos de hacer cosas diferentes, lo que no pudimos hacer, lo recurrente, los cambios, los retos, en fin un buen año, siempre es bueno porque maduramos.
Cerrarlo con gratitud es la clave para avanzar.
¿Qué quieres en este nuevo ciclo 2016?
Esta época del año nos permite reflexionar y nacen nuestros deseos de cambio, aprovechemos el ímpetu.
Toma una libreta y escribe todo lo que quieres del próximo año:
- ¿cuáles son tus sueños?,
- ¿qué dones quieres compartir?,
- ¿cuáles son tus metas en cada área de tu vida?
- ¿qué hábitos necesito cambiar para ser mejor persona y cuidar más de ti?
- ¿qué necesitas de dejar de hacer ya?
Confiar en que algo grandioso nos espera si decidimos abandonar el pasado, esto sólo sucede si tenemos el valor de cerrar ciclos emocionales abiertos por miedo al cambio.
La reflexión es la que te permite ubicar con claridad hacia dónde vas y qué es lo que tu corazón ansía vivir.
Poner en la balanza lo que es más importante para ti, serte fiel es la premisa fundamental, respetarte es una forma de amarte.
Perdona y da las gracias… cierra el libro del 2015 con una sonrisa y abre uno nuevo, donde cada hoja será mejor que la anterior, la vida es de aceptar, vivir, sentir y soltar.
Que este nuevo año sea de gozo, de bendiciones, de darle valor a lo que en nuestra vida lo tiene, que el ingrediente principal sea el amor, lleno del deseo de dar lo mejor de nuestro corazón, en abundancia y paz… y de esto estará lleno todo nuestro año.
FELIZ AÑO NUEVO
(PENSAMIENTO DE RETOS FEMENINOS)